“Desde que era adolescente he hecho todo tipo de dietas, absolutamente todas. Creerme todos los remedios y llevarlos a cabo creyendo que alguno haría un milagro. Cuando tuve la posibilidad de permitírmelo, cuando vi que por mi cuenta no resolvía mi problema, decidí buscar un nutricionista para que me ayudara a lo que yo creía que era entonces el principal objetivo: perder peso, Fue entonces cuando pase por infinidad de ellos y por x o por Y, cambiaba...

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Hace un año cuando tuve la oportunidad de ponerme en manos de Diana, me hizo entender que no era una cuestión de hacer dieta un par de meses restringiéndome para después volver a lo de siempre. Se trataba de un cambio en el estilo de vida y la alimentación, reeducarse y tumbar mitos.Fueron varios meses acudiendo a su consulta y viendo cambios y progresos, entendiendo también que no somos un peso en una báscula, que nuestro cuerpo se compone de muchas otras cosas a las que hay que prestar atención.

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GRACIAS, Diana por darme las herramientas necesarias para cambiar, ayudarme como lo hiciste y ser una apasionada de tu profesión como lo eres porque eso es lo que realmente marca la diferencia entre los demás.”